Navegar en internet no es tan fácil como abrir una web y listo, comenzar a disfrutar todo lo que el mundo digital tiene para ti. Esto debido a que cada vez existen más riesgos al abrir tu navegador. Para protegerte mientras navegas por internet y ayudarte a acceder a diferente contenido bloqueado o restringido existen tanto las VPN como los Proxy Web. Resulta muy común confundirlas, es por eso que aquí te diremos cuáles son las 5 principales diferencias que hacen (Spoiler) que la VPN sea mejor que el proxy.
¿Qué es un servidor Proxy?
Un servidor proxy es un sistema el cual se conforma de un servidor Proxy el cual se ubica entre tú e internet. El funcionamiento es muy simple, tú te conectas al servidor y el servidor a la red. Dentro de este servidor encontramos diferentes tipos de proxys. Cada servidor ofrece un funcionamiento diferente, aunque todos usan el mismo sistema. Parece muy similar a la VPN ¿No?
La principal diferencia que tiene el Proxy es el nivel de cifrado pues aquí no se encriptan los datos. Su principal objetivo es permitir un gran número de conexiones en el mismo servidor.
¿Y qué es una VPN?
Por otro lado, encontramos a la VPN, la cual es una de las innovaciones más grandes que encontramos en internet. Se trata de una tecnología que permite crear una red privada la cual desarrolla un puente entre tú e internet.
Así es, al igual que el servidor Proxy, tú te conectas a la VPN y esta, a su vez, se conecta a internet solo que aquí se forma un escudo de protección. Esto debido a que la VPN encripta tus datos protegiéndote de ataques cibernéticos e intrusiones.
Las 5 razones por las que una VPN es mejor que un proxy
- Cifrado de datos
La principal diferencia que encontramos entre una VPN y un Proxy está en el cifrado de datos. Y es que una VPN encripta la información mientras que un Proxy no. Esto es fundamental, ya que la importancia del encriptado de datos es enorme. Si nos vamos a los datos, el creciente número de cíber delitos lo respalda. Cada vez hay más y más robos de información.
Esto hace que la seguridad ofrecida por la VPN sea mucho mayor que la que ofrece un proxy.
- Requisitos de sistema
Si bien un servidor proxy no requiere del último sistema operativo para utilizarse como sí lo hace una VPN, ya que esta se instala, el Proxy tiene un punto en contra, la exigencia de hardware. Así es, al poner en marcha el proxy este hace que el ordenador destine muchos recursos de hardware.
Al requerir de una mayor potencia de hardware y recursos, los requisitos de sistema suelen limitar qué ordenadores pueden usarlo. La VPN quizás requiera de un sistema operativo actualizado, pero su funcionamiento no exige una mayor cantidad de recursos de hardware.
- Wifi pública
Otra de las grandes ventajas que ofrece es que esta permite una mayor protección y seguridad al navegar en línea, sobre todo en redes públicas. Es importante recordar que una red pública es una puerta abierta para que hackers y delincuentes se cuelen en nuestros dispositivos.
Gracias a que la VPN crea un túnel entre tus dispositivos e internet formando un escudo con su servidor, y además cifra la conexión, será prácticamente imposible colarse dentro. En cambio, en el Proxy las defensas son endebles pues aquí no hay ningún cifrado de datos en la conexión.
- Fácil de usar
Si bien ambas tecnologías comparten un funcionamiento similar, la VPN es una herramienta mucho más fácil de usar. Descargar, instalar y ejecutar tu VPN es muy sencillo. ¿No nos crees? Solo prueba el software VPN rápido para Windows para entenderlo. Podrás iniciar tu VPN en cuestión de segundos. ¡Ahora sí adiós a los hackers!
Otra de las grandes ventajas es que se adapta muy bien a distintos usos y dispositivos lo que simplifica aún más su uso. No tienes que sufrir porque el servidor no se adapta a tu dispositivo.
- Saltar la seguridad anti proxy
Una de las principales desventajas a las que se enfrentan las Proxy es el hecho de que estas se ven limitadas por la tecnología Anti Proxy. Esta tecnología consiste básicamente en una serie de medidas que bloquean la conexión con los servidores.
En cambio, las VPN no tienen este tipo de restricción, ya que pueden operar con total libertad, sin ningún tipo de bloqueo o de sistema que las elimine. Prácticamente son indetectables lo que resulta muy útil a la hora de buscar saltar un Firewall. También podrás cambiar tu ubicación fácilmente.
Consejos para elegir una VPN
- Verifica los requisitos de sistema: Si bien los requisitos de sistema de una VPN son mucho menores que las de otras apps similares como un antivirus, nunca está de más revisarlos. Hoy en día existen muchas VPN con la capacidad de correr en dispositivos de gamas bajas.
- Busca reseñas: Al existir una gran cantidad de VPN disponibles en el mercado, siempre es recomendable darles un vistazo. Y es que la experiencia del usuario puede decirte más de lo que crees. Hay veces que un usuario puede cambiar toda una perspectiva y desenmascarar a una VPN poco fiable.
- Compara precios: Hay VPN que son gratis y otras que requieren de pago para usarlas, ya que son premium. Es importante comparar precios para así asegurarte de que estás con la mejor opción. Si buscas un mayor nivel de protección, una premium va bien, si solo quieres algo básico, opta por la gratis.
- Mejor VPN que proxy: Es probable que te topes con la opción de usar un proxy, te recomendamos que no la tomes en cuenta. Esto debido a que el servidor proxy resulta ser menos efectivo en seguridad que una VPN. Siempre pon a la VPN como tu primera y única opción.