No faltamos a nuestra cita semanal con la nostalgia. Empezamos agosto con el que fue el rey de los medios de almacenamiento. El papá de la MicroSD que echas de menos en tu iPhone, que se mantuvo como el principal medio de transferencia de datos y que siempre quedará en el recuerdo de quienes los llegamos a usar. En el Throwback Thursday de hoy, el Floppy Disk.
Los Floppy Disk: Más de 30 años en uso
Antes de nada… ¿Qué es un Floppy Disk? Es un disco de almacenamiento magnético flexible que viene guardado en una carcasa de plástico y una pieza metálica que se desplaza para permitir su lectura/escritura.
Los Floppy Disk fueron desarrollados durante los años 60, pero no los pequeños que solo conocemos los más jóvenes. En 1971 llegaron los Floppy Disks de 8 pulgadas, es decir algo más grandes que los vinilos más pequeños, los singles. Un tamaño respetable que los convertía en un formato poco portátil, muy lejos de los pendrives actuales. Los conocidos como Type-1 tenían una capacidad que oscilaba entre los 70KB y 1.2MB.
Más tarde, a finales de los 70, llegaría el formato intermedio, 5¼ pulgadas, que aunque era más pequeño que su predecesor mantenía unos 13.3cm que no son pocos. Aunque su máximo fue 10MB, OJITO UN DIEZ MILLONES DE BYTES.
Por último, tenemos los Floppy Disk más conocidos, que ya dominaban a finales de los 80. Los de 3½ pulgadas. Los más comunes, los que todos conocemos y que si rebuscamos por los cajones de casa aún encontraremos. Su capacidad más famosa fue 1.4MB, no obstante llegaron a los 200MB a finales de los 90.
Llegó el CD, se acabó la fiesta
El fin del Floppy Disk lo sentenció la llegada de los CD de datos. Cuando una pieza ligeramente mayor a un Floppy Disk normal con un precio similar tenía 500 veces más capacidad. Que además ya había sido introducido por la industria de la música.
A los CD les sustituyeron, simultáneamente, los pendrives y los DVDs (en cuanto a formato), los primeros en el aspecto estrictamente informático, y no es para menos, los USBs son dispositivos pequeños, reutilizables y muy sencillos de usar.
Hoy en día los pendrives están perdiendo fuerza en favor de la nube. Por qué usar un medio físico si las conexiones actuales me permiten acceder a los archivos a la misma velocidad. Ahora bien, los CDs se siguen usando y los Pen-Drives también.
Hasta aquí este #TBTGizlogic . Esperamos verte en el siguiente.
¿De que quieres que hablemos en el próximo Throwback Thursday? Cuéntanoslo en los comentarios.
Me gustaría que hablaras de las grabadoras de CDs domésticas, como el friki de la clase se hacía popular porque podía copias pelis o discos de música, ese «pequeño comercio» que rozaba la legalidad en los patios del instituto. Todo lo positivo y negativo que trajo tras de sí la llegada de estas unidades a nuestros hogares.
Y ya de paso, felicitarte por el artículo de los «disketes»
Un saludo
Algo así como un «#tbtGizlogic: Nuestra vida antes de Netflix», no? xD