El Samsung Galaxy S8 ya ha sido presentado. Como siempre, una gran expectación ha acompañado al evento neoyorkino con el que los surcoreanos lograron parar el mundo ayer por la tarde. Todos los medios fijamos nuestra vista en él y, aunque nos gustó mucho lo que vimos, ese hype que intentaron crear a golpe de hacernos creer que iba a ser algo totalmente revolucionario, nos ha dejado algo decepcionados esperando ese algo «más».
Ahora, el propio Samsung ha publicado una infografía con las diferencias entre el Galaxy S7 y el Galaxy S8. Y nosotros, te hemos preparado un vídeo especial con esta información:
Las 5 principales diferencias entre el Samsung Galaxy S7 y el Galaxy S8
Infografia Samsung galaxy s7 y galaxy s8
Podemos sustentar las principales diferencias entre el Samsung Galaxy S7 y el Galaxy S8 en cinco pilares fundamentales:
Pantalla:
La pantalla siempre es lo primero que nos entra por los ojos y esta vez Samsung la ha cuidado con esmero. De hecho, gran parte de su presentación giraba en torno al concepto de «pantalla infinita». Por supuesto no lo es, pero no podemos negar que roza la perfección (si es que esto existe).
Cambia su tamaño, su resolución y varía también la relación de aspecto. Mientras que el S7 nos dejaba 5.1 pulgadas, resolución Quad HD y una relación 16:9 con 577 ppi, el Galaxy S8 sube la apuesta hasta las 5.8 pulgadas, resolución Quad HD+ y 18.5:9. La densidad de píxeles se mantiene casi idéntica: 570 ppi.
Carga y batería:
Aunque el S7 ya venía equipado con carga rápida, el S8 hace evolucionar su conector y llega equipado con un USB Type-C.
Misma batería en ambos casos (Samsung, ¿qué te cuesta darnos un poquito más de gasolina?), pero en este caso, otra de las diferencias entre el Galaxy S7 y el Galaxy S8 es que este último, llega equipado con una nueva tecnología que nos promete cargar el 100% de la batería en solo 20 minutos. Se llama Galaxy S Charge+ y junto con SmartDischarge, otra nueva tecnología para optimizar el uso de la batería, nos promete más autonomía con los mismos miliamperios. Habrá que verlo…
Cámara delantera:
La cámara delantera crece, pasando de los 5 MP con los que contaba el Samsung Galaxy S7 hasta los 8 MP del nuevo Galaxy S8. Eso sí, se mantiene la misma apertura (f/1.7), por lo que las buenas fotografías en condiciones de baja iluminación, están garantizadas.
Rendimiento y memoria:
O como solemos llamarlo, el «hardware puro y duro» también ha presentado cambios, evidentemente. Comenzamos por su procesador, que no solo cambia de modelo si no también de proceso de fabricación, pasando de un 14nm a un 10nm (recordamos que el S8 contará con el Snapdragon 835 o el Exynos 8894, según mercado).
La memoria interna ya no nos dejará elegir entre 32 o 64 GB, si no que estará disponible únicamente en el tamaño más grande. Eso sí, esta vez será tipo UFS 2.1.
Software:
Junto con su ¿revolucionaria? pantalla, Samsung también quiso hacer mucho hincapié durante su presentación en el apartado del software. Entre las diferencias del Galaxy S7 y el Galaxy S8 no solo vemos una evolución en cuanto a sistema operativo, pasando de Android 6.0 a Android 7.0, si no que también incluye el esperadísimo Bixby, el nuevo sistema de inteligencia artificial que promete hacernos olvidar a Siri.
Por otro lado, también han mejorado el sistema de autenticación, dándonos ahora cinco posibilidades: se mantienen el pin, patrón y la huella, y le sumamos ahora el desbloqueo por iris y facial.
Estas son las cinco principales diferencias entre el Samsung Galaxy S7 y el Galaxy S8. Una evolución lógica que nos deja muy buen sabor de boca y muchas ganas de probar el terminal.
En unos minutos te ofrecemos la comparativa entre el Galaxy S7 Edge y el Galaxy S8+.
