Antutu, el test más famoso de entre todos los utilizados para medir el rendimiento de un smartphone se ha actualizado, y no ha sido una actualización menor, ya que ha pasado de su versión 5.7.1 a la versión 6.0. La cuestión no sería demasiada noticia si no fuera porque esta última actualización ha rediseñado completamente los criterios de valoración que hasta ahora tenía este test. El resultado: Una subida generalizada de puntuaciones y una mejora, también generalizada, de los smartphones que usan procesadores Qualcomm así como de los nuevos iPhone 6s.
Antutu 6.0: ¿Que ha cambiado?
Pues bastantes cosas, a parte de un nuevo diseño, que ahora nos permite acceder a las características de aquellos terminales que aparecen en el ranking oficial (páginas chinas, eso sí), lo más importante son los cambios en la importancia que cada una de las pruebas tiene en la puntuación final del test:
1 – Ahora se le da más importancia a la prueba de GPU, que ha sido completamente rediseñada, y que nos obligará a descargar una app separada con el test en cuestión. Se trata de un nuevo test diseñado bajo Unity 3D 5.0, un motor gráfico que ya usan varios desarrolladores, y que por lo que hemos podido comprobar, pondrá de rodillas a la mayoría de gráficas integradas en los SoCs más potentes, ya que ni siquiera un Galaxy S6 mueve con completa fluidez todo el test. Esta prueba se compone de un primera parte «en pantalla», que usa la resolución nativa del terminal y uno fuera de pantalla u «off screen» que no tiene ningún límite de fps, y que exprime al máximo la GPU y el procesador.
2 – Otro aspecto que se ha reformado es el test de CPU, conscientes de que la mayoría de pruebas anteriores se ejecutaban en un solo núcleo, se ha decidido una mayor importancia en la puntuación final a la prueba mono-núcleo que a aquella que hacía uso de todos los núcleos a la vez.
3 – Rediseñado también ha sido el test de UX (experiencia de usuario), donde se han añadido nuevas pruebas pruebas que intentan reflejar mejor el uso real de un smartphone: procesado de datos e imágenes, rendimiento I/O, seguridad en los datos.
En resumen, Antutu 6.0 resta importancia a las pruebas de CPU y RAM, y aumenta la de las pruebas de UX y potencia 3D.
¿Es adecuado o justo Antutu 6.0?
Como hemos podido ver, este nuevo Antutu 6.0 cambia completamente los criterios utilizados hasta ahora para valorar el rendimiento de un smartphone, beneficiando a los terminales más potentes, pero perjudicando a otros que tengan un rendimiento inferior en los apartados que ahora tienen menos peso.
A partir de este momento es cuando nos ponemos algo conspiranoicos o al menos, escépticos. Y es que aunque vemos lógico hasta cierto punto darle una relevancia mayor a la UX o experiencia de usuario, no podemos dejar de pensar en cuan correcto es dar una mayor importancia a la GPU de un terminal. No vamos a negar ahora que cada vez hay juegos más potentes y elaborados en el universo Android y de los smartphones en general, pero, ¿realmente es el criterio principal para comprar un terminal? ¿Es jugar el uso principal de un smartphone? Nosotros nos atreveríamos a decir que no, ya que a pesar de ser un uso muy legítimo, la mayor parte del tiempo no estamos jugado con nuestro smartphone (para suerte de nuestras baterías). ¿Cual es la motivación entonces de dar una mayor importancia a este apartado?.
Aunque esta pueda parecer una pregunta baladí, no lo es, y para argumentar esta postura os vamos a enseñar una captura realizada con el terminal de uno de nuestros redactores: Un Galaxy S6 versión «flat».
Analicemos por un momento los primeros puestos del ranking que nos muestra el nuevo Antutu 6.0. En primer lugar tenemos al Huawei Mate 8, el cual hace uso del novísimo Kirin 950, es el único procesador del ranking en hacer uso de núcleos con arquitectura Cortex-A72, así que es bastante razonable verlo en primer lugar. Pero sigamos analizando dicho ranking, a continuación, vemos que el segundo puesto es ocupado por el Meizu Pro 5. Para los que no lo sepan, el Meizu Pro 5 es el único terminal del mercado en hacer uso del mismo SoC Exynos 7420 integrado en todos los Galaxy S6 y en el Galaxy Note 5; y el hasta hace poco, el SoC más potente del mundo smartphone.
Viendo esta lista, podría parecer que Meizu ha hecho un trabajo tan bueno con el Exynos 7420, que ha sido capaz de mejorar el trabajo del propio fabricante en sus S6 y Note 5, pero la trampa está en un lugar, y es que el Meizu Pro 5 hace uso de una pantalla Full-HD, mientras que los restantes terminales de Samsung hacen uso de una pantalla 2.5K o 1440p. Si ya de por sí terminales con el mismo SoC obtenían mejor puntuación cuanta menos resolución manejaban, al tener ahora el apartado de GPU un mayor peso en este test, una menor resolución de pantalla da como resultado mayores diferencias de puntuación en terminales con el mismo SoC.
Hecha la ley, hecha la trampa. Y para muestra un botón, si el lector vuelva atrás en este artículo, puede comprobar como un iPhone 6 con su Apple A9 y su resolución HD, pasa de tener una puntuación de unos 5.000 puntos menor respecto a un Galaxy 6 Edge, a tener una puntuación 43.000 puntos mayor que éste. ¿Ha mejorado tanto un iPhone 6s de buenas a primeras? Se ha quedado manco un Galaxy S6 Edge ahora? No, siguen siendo los mismo terminales, y desde luego no vamos a entrar a valorar si un Galaxy S6 es mejor que un iPhone, porque eso es tarea de las oleadas de fans de una y otra marca, pero lo que está claro, es que esto demuestra claramente como según que criterios, dos smartphones muy potentes e igualados, pueden parecer sustancialmente diferentes en rendimiento.
Y uno se pone más conspiranoico aún, pues si analizamos los puestos 5º,6º y 7º de nuestra prueba particular, vemos que dichos puestos están ocupados por 3 smartphones que hacen uso del Snapdragon 810, un SoC famoso a estas alturas por sus problemas de calentamiento, pero que, curiosamente, dispone de una gpu muy potente (Adreno 430). Viendo nuestra prueba real, y realizada en condiciones idóneas (modo avión, sin apps abiertas en segundo plano), uno puede pensar que un SoC tan problemático como el Snapdragon 810 es mejor que el Exynos 7420, y por lo tanto es inevitable preguntarse: ¿Está de verdad este test reflejando de forma más eficiente el rendimiento de un SoC, o hay determinados intereses que han jugado en esta ocasión para hacer parecer mejores a determinados smartphones o compañías?
Otro punto que apoya esta teoría es el hecho de que el futuro Snapdragon 820 hace uso de una arquitectura de 4 núcleos muy potentes frente a los 8 núcleos de los que hará uso del Próximo SoC M1 de Samsung. Hasta ahora todas las filtraciones ponían como ganador al próximo SoC de Samsung, con una puntuación que ya superaba los 100.000 puntos en Antutu 5.7. Sin embargo, recientes filtraciones otorgan un rendimiento de más de 130.000 puntos al Snapdragon 820. Y es que este nuevo Antutu 6.0, que da más importancia al apartado mono núcleo y a la GPU, parece diseñado a medida de los SoC de Apple y Qualcomm, que apuestan por menos núcleos, pero con un ipc más alto.
Piense el lector por un minuto, ¿es el Samsung Galaxy S6 o Note 5, con su pantalla 2.5 K Super Amoled, con una de las mejores cámaras del mercado y un funcionamiento de primera, peor terminal que un OnePlus 2, un Meizu Pro o un HTC M9?. No es que Samsung nos pague comisión, ni queramos ser partidistas, es simplemente que no podemos evitar dudar de las buenas intenciones de este nuevo test, cuando los resultados que ofrece, ni valoran la fuerza bruta de un SoC (que hasta ahora era su principal cometido), ni valora un smartphone en su conjunto, ya que no tiene en cuenta ni la resolución de la pantalla, ni su apartado fotográfico; pero si su potencia gráfica. En definitiva, que este nuevo Antutu 6.0 nos parece tremendamente subjetivo y tendente a crear valoraciones erróneas. ¿Y si un test sintético provoca eso, para qué nos sirve?.
No nos malinterpretéis, entendemos que se quiera valorar mejor el rendimiento real de un terminal, pero si no se usa una única prueba gráfica «offscreen» ni se tiene en cuenta el escenario más habitual de un smartphone, que es tener varias apps abiertas a la vez usando varios núcleos; si se valora menos el rendimiento bruto en pro de criterios poco acertados, no creemos que esta nueva versión 6.0 sea la más objetiva de todas. Pero claro, es solo nuestra opinión, ¿Cual es la vuestra?.