Hace poco más de un mes que entró en vigor el artículo 66.1b, mediante la cual quedan prohibidas las llamadas Spam. Si embargo, en un mundo ideal no habría asteriscos ni trampas, pero no siempre es así. Por eso, es posible que todavía recibas este tipo de llamadas. ¿Por qué? Hay ocasiones en las que están justificadas, pero en otros casos puedes luchar contra ellas. Vamos a descubrir ambas casuística y cómo denunciar una llamada Spam.
¿Por qué me siguen entrando llamadas de publicidad?
Lo primero, queremos recordar cómo está hecha la ley y, por tanto, cómo están consiguiendo algunas empresas que puedan seguir llamándote sin incumplirla. Hay varios casos en los que te pueden llamar. Si la llamada procede desde el extranjero (por ejemplo, un call center ubicado en Reino Unido o en México), es totalmente legal, incluso si la empresa es española. Además, si has dado tu consentimiento expreso (cuidado al marca la típica casilla de «acepto comunicaciones comerciales» cuando te registras en una web) o si eres cliente, las llamadas están permitidas.
¿Cómo denunciar una llamada Spam?
Sin embargo, si consideras que estás en tu derecho de denunciar una llamada Spam, hay varios caminos para hacerlo y que no salgan impunes por saltarse la ley. La más sencilla es a través de la OCU, en el formulario habilitado puedes enviar una reclamación amistosa a la empresa y, en caso de que no te convenza la respuesta, puedes hacer uso de los servicios de esta Organización de Consumidores y Usuarios para iniciar un procedimiento legal (solo para suscriptores).
Otra opción es a través de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD). En su apartado de Trámites, verás ahora una sección de Publicidad y Llamadas Comerciales. Puedes poner tu reclamación aquí.
Por supuesto, si no quieres recurrir a terceros, siempre puedes pedir en la propia llamada que te abran una reclamación contra la empresa. Probablemente te cuelguen, pero al menos te aseguras que no te van a volver a molestar.
