El logo es un elemento clave en el proceso de construcción de la identidad de marca. Los logos de empresas deberán reflejar los valores y la cultura de la corporación y para esto es necesario conocer la personalidad de la marca para luego proceder al proceso creativo de diseñar el logo, bien con la contratación de un diseñador gráfico o utilizando plataformas que ofrecen el servicio de diseño personalizado y gratis.
Un logo es un símbolo gráfico, una combinación de imágenes, colores y tipografías que identifica a una corporación, un producto comercial o una institución. En un mundo lleno de elementos gráficos es una forma sencilla de identificar una marca y cuyo objetivo es sintetizar la esencia de la marca.
Es uno de los activos más importantes de una empresa, quizá al mismo nivel de los productos y servicios que ésta ofrece. Representa la identidad visual de la marca y es la síntesis de la trayectoria de la organización y de sus valores.
A gusto de la empresa y también del público
En el proceso de branding, definir la identidad de la marca es uno de los aspectos más importantes y debe hacerlo la empresa para poder transmitirlo a los diseñadores gráficos. Una vez que se logre definir qué hace única a la empresa, de qué se trata la marca y qué mensaje se quiere comunicar, será más fácil el diseño del logo.
Un logo cuidadosamente diseñado debería ser a gusto de la marca, pero también del público. Debe ser único, despertar el sentido estético de las personas y diferenciarse sobre las marcas competidoras. La marca se vuelve tangible a través del logo.
El logo suele ser el primer contacto entre la marca y su público y por lo tanto deberá identificar a la marca a primera vista. Uno de los objetivos de un logo es infundir confianza y transmitir un determinado mensaje al público y puede empujar la marca al éxito o hundirla por completo.
Los logos evolucionan con la marca
Los logos también envejecen y pueden mantenerse en el tiempo o renovarse. Pero, ¿porqué una corporación decidiría cambiar su logo?.
Las razones son varias. Si el entorno en que la marca se mueve cambia, también debe hacerlo el logo. Un ejemplo es el logo de Google que ha evolucionado por diversas razones, pero una de ellas, el cambio de 2015, se debió a que su tipografía debía adaptarse a las nuevas pantallas, tanto de ordenadores como de teléfonos móviles.
Algo similar ha ocurrido con la irrupción de las redes sociales. Las empresas ahora deben diseñar sus logos o modificar los anteriores para encajar en los perfiles de las redes sociales ya que hoy en día son también canales de mercadeo y venta.
Existen razones más de fondo para que una corporación deba cambiar su logo. Las ventas de activos o de segmentos de negocios, las fusiones y adquisiciones o la eliminación de líneas de producción son razones que obligan a cambiar los logos de las empresas para reflejar lo que ahora son. Un ejemplo reciente es el rebranding de Facebook luego del cual se transformó en Meta.
¿Por qué es importante un buen logo?
Muchos son los argumentos que podemos enumerar en favor de la importancia de diseñar un buen logo. Los siguientes son solo algunos de ellos:
- La primera impresión:
La primera impresión es extremadamente importante ya que a menudo los compradores tienen muchas opciones a la hora de decidirse por un producto o servicio. Un logo es lo primero que el potencial cliente verá y un factor importante para la toma de decisión.
- Lealtad de marca:
Un buen logo funcionará como un gancho para acercar a potenciales clientes, pero también y quizá más importante, influirá para que regresen. Si se consigue que el logo se asocie con aspectos y sentimientos positivos probablemente los clientes recordarán la marca, la buscarán y volverán. Se habrá establecido una relación de confianza.
- Diferenciación:
A través del logo una empresa puede conseguir diferenciarse de su competencia. Los colores, estilos de tipografía, formas, en fin, el diseño del logo es la manera más sencilla de reflejar la esencia de la marca y marcar las diferencias con sus competidores.
Un logotipo simple pero poderoso
El objetivo principal de un buen logotipo es capturar la esencia de la empresa. Para esto definir la identidad de marca es determinante. Esto es, conceptualizar la personalidad de la empresa y los aspectos que la hacen única. Debe entonces el logotipo ser a gusto de los representantes o dueños de la marca.
Pero el logotipo debe también ser sencillo y atractivo para los potenciales clientes. No necesariamente debe ser el más elegante, difícil y costoso. El logo no debe distraer a los consumidores de los objetivos principales: transmitir el mensaje que se quiere de forma sencilla y eficaz.
