Hola a todos, y en especial a los fumadores, porque hoy os voy a hablar del nuevo dispositivo de PMI (Marlboro), IQOS. Hace unas semanas que recibí mi dispositivo y os voy a contar como se usa, mi experiencia y algunos datos más sobre este dispositivo que calienta el tabaco en lugar de quemarlo. Para empezar, decir que esto no sirve para dejar de fumar o al menos no está concebido para ello, si no que es un dispositivo para continuar consumiendo tabaco con una serie de ventajas, y sobre todo si no eres fumador, ni lo pruebes ni sigas leyendo (no debería decir a mis lectores que no sigan leyendo un artículo de Gizlogic) porque no te va a aportar nada. Por el contrario, si eres fumador, sigue leyendo porque si te va a interesar bastante y espero que tengáis la misma experiencia que he tenido yo con IQOS.
Un poco de historia.
El tabaco y los fumadores en general cada vez están peor vistos. Fumar constituye un alto riesgo para la salud del propio fumador y los que están a su alrededor y las tabacaleras saben que nuestra forma de consumir tabaco en la actualidad va a morir en unos pocos años. Es por esto que buscan reinventarse e invierten en investigación para encontrar productos que demuestren una sustancial reducción en el riesgo de contraer enfermedades relacionadas con fumar, visto que según los datos de la OMS se estima que en 2025 habrá mil millones de fumadores en el mundo
PMI comenzó a desarrollar IQOS en el año 2008 en su planta de innovación Suiza. Con un equipo de 430 expertos en I+D y una inversión de más de 3.000 millones de dólares, en el año 2014 lanzan el primer piloto de IQOS, siendo en 2016 y 2017 cuando empiezan su comercialización y expansión geográfica. Actualmente PMI trabaja en 4 plataformas o productos innovadores que se encuentran en diferente fase de desarrollo y/o comercialización. Dos son productos de tabaco sin combustión: IQOS, (llamado internamente por PMI Plataforma 1) y Plataforma 2, y dos contienen nicotina sin tabaco: la Plataforma 3 y la Plataforma 4.
Las primeras pruebas de IQOS se realizaron en Japón y Milán a finales de 2014. En el país Nipón, la penetración de mercado ha alcanzado el 10% del mercado total de cigarrillos y más del 80% de los fumadores adultos que han probado IQOS lo consumen de forma exclusiva o predominante. Actualmente IQOS se comercializa en 25 países y sus planes son alcanzar 30-35 países a finales de 2017.
IQOS, qué es y cómo funciona.
IQOS se compone de dos partes esenciales: El cargador y el dispositivo para consumir el tabaco (Este tipo de tabaco se denomina HEETS). El cargador de bolsillo sirve para cargar el dispositivo, guardarlo mientras no lo utilizamos y limpiarlo, mientras que el dispositivo sirve para calentar el tabaco. El producto tiene un acabado impecable y bastante estilizado y las dimensiones son aproximadamente las de un paquete de tabaco. Está disponible en color blanco y azul marino.
La principal diferencia respecto al cigarrillo normal es que IQOS calienta el tabaco en lugar de quemarlo, por lo que eliminamos la combustión. Las unidades de tabaco para calentar (HEETS) a utilizar en el dispositivo no son cigarrillos convencionales. IQOS, una vez encendido, calienta el tabaco generando un aerosol diferente al humo, aunque la experiencia es bastante similar al cigarrillo convencional. El dispositivo posee una lámina en su interior encargada de calentar el tabaco por debajo de los 350 grados y que a su vez contiene un sensor de temperatura que evita la combustión.
Para finalizar este apartado, el precio de IQOS es de 70€, una inversión que merece la pena. Recordamos que solo lo recomendamos si eres fumador y quieres ir dejándolo poco a poco o, al menos, fumar de una forma algo menos perjudicial de lo que lo hacemos con el tabaco tradicional. Si no eres fumador, ¡no lo pruebes!
Os dejamos con un vídeo que explica todos sus componentes, un poco de teoría para que entendáis mejor cómo funciona IQOS en la práctica y qué tipo de producto estás adquiriendo realmente.
Como usar IQOS y su mantenimiento.
Partimos de que tenemos IQOS dentro del cargador de bolsillo. Pulsando el botón superior del lateral abrimos el cargador y podemos extraer el dispositivo. Como puedes ver en este GIF, su apertura es muy sencilla y podemos hacerlo utilizando solamente una mano, algo ideal si estamos haciendo cualquier otra actividad.
Una vez que tenemos IQOS en nuestra mano, procedemos a insertar el heet por la parte superior y con el tabaco mirando hacia abajo. Hay que hacer especial atención cuando introducimos el tabaco y no girar el cigarrillo, ya que podemos partir la lámina que hay en el interior e igualmente mientras lo usamos. Una vez introducido el heet, pulsamos el botón durante unos segundos hasta que la luz verde comience a parpadear. Cuando esta esté fija, podemos comenzar a fumar. La duración será de unos 6 minutos o unas 12-14 caladas. Cuando la luz se ponga roja quiere decir que nos quedan un par de caladas para terminar.
Bien, hemos acabado nuestro heet, ahora tenemos que sacarlo. Para sacarlo es importante quitar el cabezal antes, así evitaremos que se nos quede tabaco dentro. Una vez quitado el heet, ponemos IQOS en su cargador y en menos de 5 minutos podremos volver a utilizarlo si nos apetece. La batería se enciende automáticamente cuando insertamos IQOS para tenerlo siempre cargado, por lo que no necesitamos encenderla o apagarla manualmente, un plus añadido que nos facilitará bastante la tarea para no perder batería de forma innecesaria.
Respecto al mantenimiento, IQOS realiza un limpieza de la lámina de calentamiento cuando lo insertamos en el cargador cada 20 usos aproximadamente. Después de esta limpieza automática (que es una especie de pirólisis) debemos limpiarlo con las escobillas proporcionadas junto al producto y si aún queda suciedad, con los bastoncillos para ello (no usar otro tipo de bastoncillos). Al usar la escobilla para limpiar la lámina, podremos girarla 45 grados hacia cada lado, siempre con cuidado. Recordad, la escobilla grande se usar para limpiar la parte de la lámina y la escobilla pequeña para limpiar el cabezal. Con la pequeña «palita» que tenemos dentro de las escobillas podemos eliminar los restos de suciedad que queden y después utilizar los bastoncillos. La limpieza es altamente recomendada, ya que en caso contrario la sensación que nos proporcione IQOS será diferente. Como apunte, la limpieza automática la podemos lanzar manualmente cuando queramos con el botón que tenemos en el cargador justo encima del botón de encendido (sin olvidar de introducir IQOS antes).
Nuestra experiencia con IQOS.
Hemos tenido la ocasión de hablar con un responsable de IQOS para conocer más en profundidad el producto y todos los aspectos más relevantes del mismo. Después de ver cómo funciona y cuáles son sus componentes, vamos ahora con lo que realmente os interesa y a lo que realmente le vais a sacar partido en la práctica: nuestra experiencia con el producto.
Lo primero que me dijeron cuando hicimos la reunión con PMI para hablar del dispositivo es que hace falta cierto compromiso para probar IQOS, en concreto nos pidieron 7 días. Mi opinión personal es que en 2-3 días ya te has adaptado a esta nueva forma de consumir tabaco, y probar un cigarro convencional sabe realmente mal. Yo llevo 3 semanas con IQOS y por el momento mi valoración es muy positiva. He dejado de lado totalmente el tabaco convencional. Consumía unos 8-10 cigarrillos al día, y con IQOS estoy en la misma cantidad de heets sin que me haga falta más. Por comparar un poco con el cigarrillo electrónico (vapeadores), decir que la sensación que IQOS produce es mucho más cercana al cigarro convencional (lo cual es un factor de valor añadido), y sobre todo es que tras consumir un heet, la sensación de saciedad es absolutamente igual que la de un cigarro (esto es mi sensación personal). Durante los dos meses que estuve utilizando hace un año el vapeador, nunca llegué a tener la misma sensación, y necesitaba usarlo mucho más constantemente, cosa que no me ha ocurrido con IQOS. Esto, según nos explicaron en PMI, se debe a que el pico de nicotina que aporta IQOS es igual al que aporta el cigarrillo convencional, mientras que los vapeadores aportan mucho menos y de una manera distinta.
La primera vez que pruebas IQOS sí que es cierto que tiene un sabor algo raro, aunque te adaptas rápido (existen heets de diferentes sabores). Se necesita algún tiempo para aprender a dar la calada, pero es algo que con el uso viene solo. Como consejo, la calada debe ser más larga pero más suave, y podemos dejar pasar aire exterior mientras damos la calada o no según nuestro gusto. La cantidad de humo que exhalas, en este caso aerosol, es un poco inferior a la de un cigarro convencional, y con una densidad menor pero más que buena para poder disfrutar de la calada. La duración de cada uso es de unos 6 minutos o 12-14 caladas, lo que es similar a la duración de un cigarro. Le echo en falta un par de caladas más.
Como he comentado antes, la sensación de saciedad con IQOS para mi es exactamente igual que si me fumara un cigarro convencional, algo que me ha sorprendido desde el principio, y que no me había pasado ni con vapeadores ni con Pipas de agua (Shishas). No he tenido absolutamente ningún problema para dejar de fumar tabaco convencional durante estas 3 semanas, ni he necesitado ningún tipo de esfuerzo. Otra ventaja a desatacar, es que ni tus manos, ni tu pelo, ni tu ropa quedan impregnadas con el olor a tabaco.
¿Reduce el daño IQOS?
IQOS no genera combustión ni humo, sino que genera un vapor que, según los estudios de PMI, reduce significativamente los niveles de componentes nocivos y potencialmente nocivos (excluyendo la nicotina) presentes en el humo del cigarrillo. Sin embargo, no es un producto inocuo ya que las unidades de tabaco para calentar que se utilizan con IQOS contienen nicotina, que es adictiva.
La aspiración de Philips Morris es que estos productos se conviertan en una alternativa real para todos aquellos fumadores adultos que deciden quieren seguir consumiendo tabaco. Los estudios realizados por PMI hasta el momento están muy avanzados y son prometedores sin embargo, hasta que no se completen todos los estudios y se obtenga la validación por parte de las autoridades competentes, no se podrá afirmar una reducción del riesgo.
Todos los estudios y la ciencia desarrollados hasta la fecha por Philip Morris son públicos y se encuentran disponibles en www.PMIScience.com
Espero que os haya gustado mi review y experiencia con IQOS, y sobre todo, si no sois fumadores, no lo probéis, pero si lo sois, probadlo porque os va a gustar. Si queréis más información, podéis visitar la página de IQOS a través de este enlace.