LG no solo se dedica a fabricar terminales para Google, lo cierto es que últimamente están haciendo bastante bien las cosas,y prueba de ello es la polémica decisión de montar en su día el Snapdragon 808 en su G4, decisión que al final ha resultado ser bastante acertada viendo todos los problemas de temperatura que aquel dio.
Así pues, uno de sus últimos lanzamientos ha sido el LG V10, una propuesta bastante interesante a la que tampoco es que se le ha dado una gran publicidad como pueda ser el caso de los terminales Edge de Samsung, y que sin embargo, es un smartphone bastante original y redondo.
El LG V10 lleva por rangos distintivos una doble pantalla en su parte el frontal y un apartado fotográfico de muy alto nivel con dos cámaras frontales de 5 megapíxeles. Su vocación de terminal premium se ve reflejada en su construcción en acero 316L, que se encarga de enmarcar una pantalla de 5.7 pulgadas con resolución 2.5K de 2560 x 1440 píxeles. Junto encima de esta pantalla, como hemos adelantado, nos encontramos con una segunda pantalla de 2.1 pulgadas con una resolución de 1040 x 160 píxeles destinada a mostrar tanto notificaciones importantes como accesos directos a nuestras aplicaciones favoritas. Ambas pantallas están protegidas mediante un cristal Gorilla Glasss 4.
LG V10: Snapdragon 808 y 4 GB de RAM.
El músculo lo pone en este caso un SoC Snapdragon 808, el cual no se caracteriza por una potencia desmedida (unos 47000 puntos en Antutu Benchmark), pero que acompañado de 4 GB de memoria RAM y 64 GB de almacenamiento interno ampliable por Micro-SD forman un conjunto bastante redondo, y con capacidad para mover sin problemas dicha pantalla así como la inmensa mayoría de los juegos.
El resto de especificaciones se completan con un DAC HiFi que nos ofrecerá un sonido de muy buena calidad y una cámara trasera con sensor de 16 megapíxeles con apertura F/1.8 con autoenfoque láser y doble flash LED, básicamente, el mismo conjunto montado en el LG G4, y que tan buenas críticas ha recibido. También contaremos con el cada vez más común sensor de huellas, situado bajo la cámara en la cubierta trasera.
LG ha cuidado la autonomía con su LG v10, ofreciéndonos 3000mAh, que en contra de lo que suele pasar con los últimos terminales premium, llegan dentro de una batería extraíble, por lo que podremos reemplazarla en caso de fallo o envejecimiento de la misma, algo que es muy de agradecer.
Para poder conseguir que dicha batería sea extraíble, LG ha renunciado a un chasis unibody, y a cambio nos ofrece una elegante y original cubierta trasera fabricada con un material denominado «Dura Skin«, un tipo de silicona especialmente resistente a los arañazos.
