Cuando parece que ya está todo inventado, llega alguien a darle otra vuelta de tuerca al mercado. En un segmento tan competitivo como el de la tecnología, ofrecer algo nuevo a los exigentes usuarios es la clave para lograr la diferenciación y estar entre los más deseados.
En esta línea, aparece Lily, un nuevo dron que sigue al usuario y vuela de forma autónoma sin necesidad de mando a distancia. Una cualidad que eleva el precio de este dispositivo hasta los 899 dólares, aunque puedes comprarlo con un descuento de casi el 50% por tiempo limitado.
Lily Camera: fuera mandos
Lily Camera no estará precisamente entre los drones baratos, pero es cierto que sus características y cualidades merecen elevar un poco el presupuesto destinado a este tipo de aparatos.
Con Lily, nos encontramos con un dron que puede grabar vídeos a 1080p y 60fps o a 720p y 120fps, además de ser resistente al agua y ser capaz de despegar por sí solo cuando lo lanzamos al aire. Pero sin ninguna duda lo más novedoso de este dron es su ausencia de mandos a distancia: podremos controlar a Lily con nuestro cuerpo gracias a un pequeño localizador portátil con micrófono que deberemos llevar encima para que Lily se dirija hacia donde nos movamos nosotros.
Si quieres hacerte con él, no pierdas la oportunidad de hacerlo durante el período de reserva con un sustancial descuento. Lily se lanza a un precio promocional de 499 dólares el primer mes; después, su precio oficial alcanzará los 899 dólares. Una cantidad bastante elevada para la mayoría de los usuarios pero que deja en evidencia una vez más que Lily no es un dron del montón.