Motorola Moto Z es la nueva gama de smartphone presentada por su nuevo dueño, Lenovo, que se saca un as de la manga y apuesta por la tendencia modular que comenzó LG en su momento. Algunos hablan de una nueva revolución. La jugada es arriesgada; los conceptos innovadores es lo que tienen.
Motorola Moto Z Droid Edition y Moto Z Force Droid Edition.
La nueva gama Motorolo Moto Z de Lenovo, de la que haremos una completa review en los próximos días, sucede a la anterior Moto X; dispositivos con un diseño y un hardware de auténtica gama alta. A pesar de haber pasado por un momento delicado como fue su venta por Google, Lenovo está realizando arduos esfuerzos para que Motorola siga más viva que nunca.
Especificaciones.
Lenovo a optado por la pura fuerza bruta en cuanto al hardware que monta su gama Motorola Moto Z: una pantalla de 5,5 pulgadas Amoled Quad HD bajo la que se encuentra un procesador Snapdragon 820 a 2.2 GHz junto a la Adreno 530; la memoria RAM se va hasta los 4 gigas DDR4 con una memoria interna de 32/64 gigas ampliables hasta los 2 TB mediante MicroSD (los datos no tienen ningún error). El Moto Z vendrá con Android 6.0.1 y tendrá cámara de 13 megapíxeles, batería de 2600 mAh Turbopower y puerto USB Tipo C.
Por su parte el Moto Z Force tiene unas especificaciones similares, varía en su pantalla 2K, cámara de 21 megapíxeles y batería de 3500 mAh.
153,3×75,3×5,19/ 155,9×75,8×6,99 mm 136/163 gr
Lenovo no ha concretado precios; por especificaciones, creemos que no bajarán de los 500 Euros. Tendremos que esperar hasta Septiembre para saber más.
Los módulos están de moda.
Esta es la novedad más llamativa y, desde ahora, sello marca Lenovo: los módulos.
Si os gustó la propuesta de Lg, los módulos magnéticos de los Motorola Moto Z os van a encantar: por ahora, altavoces dedicados, batería adicional y picoproyector.
Decimos «de momento» porque Lenovo ha lanzado junto a los módulos un kit de desarrollo (SDK) con el que esperemos abra la posibilidad a que desarrolladores y fabricantes de todo el mundo puedan crear los suyos propios. En ese momento podremos hablar de una verdadera revolución; por ahora, lo dejamos en declaración de intenciones a la espera saber precio, disponibilidad y aceptación por parte del público.
