¿Recuerdan la curiosa nota del proyecto Neuralink permitiendo a monos jugar al pong con su mente? Pues hoy le tenemos malas noticias a todos lo que hayan seguido los acontecimientos. El Comité de Médicos por una Medicina Responsable (PCRM) presentó una denuncia contra la Universidad de California, Davis, por la muerte de 15 de 23 los monos utilizados para los experimentos con implantes cerebrales de Neuralink.
Esto deja mal parado al magnate Elon Musk, quien en su momento abogó por la eticidad de este experimento y lo calificó como “seguro y fiable”. Como pasa muy a menudo, la realidad tiende a ser decepcionante y hace poco nos enteramos de esta denuncia pública contra la Universidad de California y Neuralink; la cual no solo sostiene se dejó sufrir y morir a 15 macacos (posiblemente 16) en experimentos de mala calidad, sino que, además se ocultaron las fotos y vídeos relacionados para echarle tierra al asunto.
El Comité de Médicos por una Medicina Responsable carga contra Neuralink
El PCRM presenta su denuncia en base a casi 600 páginas de documentos médicos inquietantes publicados solo después de una demanda inicial de registros públicos en 2021.
En este sentido, el Comité afirma que los monos fueron sometidos a tratos inhumanos durante los experimentos y que el personal no proporcionó a los monos moribundos la atención veterinaria adecuada.
Neuralink, que consiste en la creación de una interfaz cerebro-computadora, es por naturaleza un desarrollo invasivo, pero la negligencia de la Universidad de California habría contribuido significativamente a este trágico desenlace.
“Los monos macacos utilizados en el experimento fueron enjaulados solos, se les atornillaron postes de acero en el cráneo, sufrieron traumatismos faciales, convulsiones después de los implantes cerebrales e infecciones recurrentes en los sitios de los implantes. En algunos casos, como resultado del deterioro de la salud, Neuralink y UC Davis aplicaron eutanasia a monos incluso antes de que fueran utilizados en el experimento planeado.”
El asunto no mejora cuando tenemos en cuenta que la UC Davis condujo los experimentos en instalaciones públicas, por lo cual están sujetos a las leyes del estado y el metraje de los experimentos son de dominio público. No obstante, la Universidad se ha negado a publicar cualquier contenido alegando que todo pertenece a una compañía privada que no está sujeta a la Ley de Registros Públicos de California.
Sea como sea, el comité de médicos no considera que lo anterior constituya una buena excusa para dejar pasar esta situación y la demanda seguirá su curso.
Esto choca duramente con la visión que nos había vendido el CEO de Tesla y SpaceX, quien afirmó que para 2023 comenzarían las pruebas de Neuralink en humanos; pero en vista de los acontecimientos actuales, quizás quieran replantearse eso último.
Vía | pcrm.org
