Cada vez que efectuamos un pago con nuestra tarjeta, sobre todo cuando es online, siempre tenemos un cierto miedo a que nos roben los datos y se realice un fraude con ellos, la mayoría de nosotros conoce a alguien que le ha pasado o quizás nos haya ocurrido a nosotros mismos. Para evitarlo Oberthur ha presentado dos tarjetas que cambian de código CCV cada 45 minutos.
Oberthur quiere garantizar la seguridad
Oberthur
Para Oberthur está claro que si no se garantiza la seguridad y privacidad de los usuarios los avances en en el comercio online no se producirán. De hecho su presidente ha declarado lo siguiente al respecto:
No hay sector en el que más se note este hecho, por razones obvias, que el de los pagos. La gente tiene temor y hay razones para ello: solo el año pasado un millón de franceses sufrieron algún tipo de fraude en la banca online.
El primer diseño que ha presentado será integrado por diferentes bancos europeos y desde la empresa se asegura que se está negociando con algunos españoles. Se ha ideado para los pagos por Internet y cuenta con una batería y una pequeña pantalla de tinta electrónica en la cual aparece el código CVV, ese que siempre nos piden cuando hacemos una compra online, que cambia cada 45 minutos.
De esta forma pretenden evitar que los piratas informáticos puedan utilizar nuestra tarjeta.
El segundo diseño está pensado tanto para las compras por Internet como para el pago sin contacto. Esta previsto que se ponga a prueba el año que viene y cuenta con un sensor de huella digital para desbloquear la tarjeta.
Esto trata de luchar contra la copia de los chips que traen este tipo de tarjetas y que hoy en día no resulta complicado e incluso los delincuentes cuentan con aparatos que son capaces de hacerlo cuando hay una gran concentración de personas, como en el transporte público.
Sin duda dos opciones interesantes.