El Panasonic Toughpad fz f1, es uno de esos terminales que se une a la minoría de dispositivos que se empeñan en luchar contra los dos grandes sistemas operativos (Android e iOS) para smartphones.
Si a esto le añadimos que los teléfonos rugged no son el tipo de smartphones más vendidos debido a que están fabricados para requisitos muy específicos, ¿habran acertado con esta apuesta?
Panasonic Toughpad fz f1, ¡menudo ladrillo!
Digo ladrillo porque este terminal tiene unas medidas de 155.5 mm x 74.1 mm x 16.2 mm y un peso de 282 gramos. Teniendo en cuenta que su pantalla IPS HD con una resolución de 1280 x 720 píxeles es de 4.7 pulgadas…
El corazón que late en su interior es un procesador de cuatro núcleos Qualcomm Snapdragon 801 el cual funciona a una velocidad de 2.3 GHz. Cuenta con 2 GB de memoria RAM y una capacidad de almacenamiento de 16 GB. Esta cifra podremos ampliarla mediante una tarjeta micro SD hasta un máximo de 64 GB.
Su apartado fotográfico no es nada del otro mundo, ya que nos ofrece una cámara principal de 8 megapíxeles y una cámara secundaria o selfie de 5 megapíxeles.
Siendo un dispositivo rugged, ya podéis imaginar que vendrá protegido contra caídas, golpes, agua y polvo con lo que la estanqueidad debería estar asegurada. Integra NFC, lector de codigo de barras y una batería de 3.200 mAh.
Porque comprar el Panasonic Toughpad fz f1
Sinceramente y pensándolo detenidamente, este que os escribe no encuentra ninguna razón por la que comprar un teléfono de este estilo por el precio tan desorbitado al que se puede encontrar en el extranjero.
Pagar 1.500 euros por un terminal de gama media que además usa Windows (esto ya es a gusto de cada uno) a fecha de hoy es un despilfarro sí o sí. Mas si tenemos en cuenta la cantidad de teléfonos del estilo que se están lanzando al mercado y a unos precio mucho mas competitivos.