Quien dice que la competencia entre las empresas no puede generar progreso en los propios usuarios. Un ejemplo de ello son las operadoras Vodafone y MASMOVIL dentro de España, pues acaban de anunciar oficialmente un acuerdo para compartir fibra óptica a lo largo de los próximos 4 años.
Estrictamente la noticia indica que Vodafone y Grupo MASMOVIL han rubricado la firma para compartir hasta un máximo de 1,9M de unidades inmobiliarias que será implementado de forma progresiva a lo largo de los siguientes cuatro años. Esto generará básicamente una notable mejoría en la optimización y eficiencia en el uso de las infraestructuras de fibra en el país.
Vodafone y MASMOVIL cumplen sus objetivos
A partir de este trabajo conjunto entre las empresas, MASMOVIL logrará hacerse con la disponibilidad de las primeras 942.000 unidades inmobiliarias de Vodafone como resultado de este acuerdo a partir del mes de diciembre. Así, la red superará los 5,4 millones de unidades inmobiliarias con red de fibra propia y se superará el objetivo de 5,1 millones que se había trazado para este 2018.
Según datos oficiales, ya durante el mes de junio MASMOVIL contaba con un total de 13 millones de hogares disponibles para comercializar sus servicios de fibra óptica. Esto no hará más que aumentar exponencialmente la disponibilidad geográfica para el acceso a internet de alta velocidad.
En lo que respecta a Vodafone, a partir de este acuerdo se llega a una cobertura de sus redes de cable y fibra de manera progresiva hasta cubrir un millón de hogares extra a su huella de red propia o compartida. Para finales de junio pasado, la gran operadora ya ofrecía un servicio de banda ancha de fibra a 20,9 millones de unidades inmobiliarias dentro de España, siendo 10,3 millones de ellas correspondientes a despliegues propios o compartidos.
En conclusión, siempre es agradable que los avances tecnológicos y de infraestructura permitan más acceso a las personas en todo el país (Vodafone ya empezó a desplegar conectividad 5G), a la vez que la competitividad de las operadoras no genere obstrucciones y malas prácticas entre ellas, sino todo lo contrario en su evolución.